Dos tristes despedidas

Este ha sido un mal fin de semana. No para mí especialmente, pero sí para la sociedad española en general. Hemos sufrido dos grandes pérdidas. La primera de ellas la marca la naturaleza. Es ley de vida. Se ha ido a los 77 años de edad y tras una grave enfermedad un gran hombre. Jesús de Polanco, dueño del grupo Prisa y uno de los mejores empresarios y más valientes de la historia de España. Siempre se van los buenos. Como ha dicho, es ley de vida, pero lo que más me ha dolido de todo esto ha sido ver lan condolencias de los políticos peperos (a excepción de Gallardón, por supuestos, que sigue siendo un gran hombre). Hasta hace nada tenían hecho una especie de complot contra Prisa y ahora que su dueño se va, parece que es la mejor persona del mundo. Después de todo lo que han dicho de el... Si es que cuando no hay vergüenza no la hay, y punto.

El otro adiós ha sido más traumática. Ha sido el adiós a la libertad de prensa de nuestro país. El viernes me enteraba de que el juez Del Olmo había dictado una resolución que solicitaba la retirada de El Jueves de todos los kioscos, además de retirar a la revista las planchas de su portada y cerrar su página web. Todo se debe a que aparecían (como se ve en la foto) los Principes de Asturias en una postura sexual explícita. No lo entiendo. Esta revista se ha caracterizado siempre por un humor de este tipo, inteligente y bordeando la linea sin rabasarla y esto es lo que han hecho, lo mismo de siempre. No es la primera portada sexualmente explícita, pero al parecer en este país no todos tenemos derecho a que se nos mida por el mismo rasero. Se supone que hay igualdad, pero eso sí, siempre que no se trate de los Reyes porque está claro que ellos están por encima de todos nosotros, o al menos a mí me ha quedado claro después de todo esto. No quiero decir con esto que la revísta no debía retirarse, digo simplemente que si han retirado esta portada deberían haber retirado antes muchas otras. De todas formas, lo único que se ha conseguido con esto es dar a esta fantástica revista más publicidad, aumentar sus ventas y conseguir que los ejemplares con la polémica portada alcancen ya cifras de 2.500 euros en internet.